¿Y AHORA QUÉ NOS QUEDA?


- Y ahora ¿qué nos queda después de esto?- le preguntaron...
- Queda lo que siempre tuvimos, lo que nadie puede arrebatarnos.
Queda seguir luchando, seguir amando, ahora más que nunca, ahora más que siempre.
Queda transformar la decepción en esperanza.
Queda tanto por hacer que me pregunto: ¿Vale la pena quedarse en el lamento?
Queda aprender de los errores propios, sabiendo que si algo no funcionó es porque había mucho por mejorar.
Queda esa lucha que siempre estuvo y que no tiene banderas, o mejor dicho sí, tiene una bandera llena de rostros, de esos oprimidos, marginados, hambrientos de amor y de pan.
Esa lucha que se libra todos los días, dentro tuyo, y que luego sale, la misma que te hace diferente, la que te impulsa a pensar que cambiar la realidad depende de una sola persona, de vos.
Queda mirarse a los ojos y sonreír, la utopía que sabés que no es irrealizable, los sueños aún vivos.

Comentarios

Entradas populares de este blog

QUE NO ME MIRE

LA FUENTE

EL INFIERNO EN SUS OJOS